martes, 19 de febrero de 2013

Arnold Schwarzenneger o "El rey midas de los 80".

En la breve historia del cine ha habido toda clase de personajes, desde Ronald Reagan, que acabó convirtiéndose en presidente de los Estados Unidos, a Clint Eastwood, que empezó siendo un actor de reparto en el cine de serie B más "olvidable", como Tarántula o Revenge of the Creature, donde sus papeles apenas abarcaban unos minutos de la trama. Pero ninguno de ellos puede compararse, para bien o para mal, con el héroe de acción por antonomasia: Arnold Schwarzenegger. El ex "Governator" de California, empezó siendo un rudimentario y atolondrado Hércules en Nueva york para acabar interpretando a héroes del calibre de Conan, el T-800 o, el menos conocido aunque uno de mis favoritos, Jack Slater. En cualquiera de los caso, Arnold siempre tuvo la habilidad de convertir una película mediocre en un gran espectáculo, solo con su presencia. De convertir la mediocridad en oro, por así decirlo

El actor austriaco es y será siempre, junto a Bruce Willis o Bruce Campbell, un icono de los 80. Entre su filmografía cabe destacar una pequeña joya de 1985 que Arnie protagonizó junto a una desconocida, y joven, Alyssa Milano (sí sí la de Embrujadas). Un año después de que nos helara la sangre con su papel de némesis de Sarah Connor, Schwarzenegger interpretó a un jefe de operaciones especiales retirado llamado John Mátrix, como la película de Keanu Reeves, que se ve obligado a volver al servicio activo para rescatar a su hija (interpretada por la actriz antes mencionada). Hablamos de Commando. La película es una sucesión de persecuciones, diálogos chorras, como "¿Recuerdas que prometí matarte el último? ¡Mentí!" o "¿Dejaste algo para nosotros? Sí, cadáveres", y sintonías compuestas por James Horner (con su muy bien definido estilo que ya vimos en Danko o en la bilogía de Límite 48 horas y 48 horas más). Pero lo que más sorprende de esta película es, aparte del tiroteo final que a mi me gusta llamar "Arnie vs el mundo", el villano o mejor dicho sus villanos. Empecemos por Sally, interpretado por el sempiterno villano de los 80: David P. Kelley. Lejos de su papel en The Warriors, en el que casi inspiraba miedo, el personaje de Kelly en Commando da un poco de pena, sobre todo en la escena en la que "liga" con la azafata. En el otro extremo tenemos a Dan Hedaya, villano semi-profesional, quien provoca la ira de Mátrix al secuestrar a su hija. Junto a Hedaya hay un villano casi tan penoso como el personaje de Kelley que no mencionaré aquí, tendréis que ver la película. En definitiva, toda una trepidante vorágine de acción y violencia, de visión obligada para todo amante del cine ochentero y del actor astroestadounidense. ¡Ah! Un pequeño consejo, recomiendo ver la película tanto en VOSE como en Castellano, ya que hay diálogos que pierden en Castellano (Como el de "Right? Wrong! BANG) y otros que ganan bastante (Como los antes mencionados). En último lugar sólo me queda decir... ¡Buen visionado!